El dolor no físico es un manantial de agua clara que puede sostenerse. Uno puede coger el dolor entre sus manos y siente el amor más grande del mundo porque aquello que nos asusta o nos tambalea, no es el dolor en sí.
El dolor sobre algo está ahí, dentro de nosotros, rebosante de vida queriendo vivir* y puede validarse y dársele la bienvenida como a esa persona que amas y que hacías perdida en algún lugar del mundo. Es reencontrarse con la verdad de uno, llena de flores y de primavera.
Pensamos que lo que nos hace temblar o lo que aprieta es el dolor. Desde la mirada de Focusing, podemos entender que no es así. Focusing propone un viaje. Un viaje a través de la verdad de cada persona, que empieza cuando arrancan los motores de la empatía y se hace durante toda la vida. En ese viaje, el dolor es un compañero de camino que se integra con las células del aire, con el aroma de las flores, con los paisajes, aportando una nueva luz a la senda. Esta senda nos llevará a una nueva versión de nosotros mismos, más completos.
Tenemos la idea de que el dolor es un monstruo horrible, que nos muerde las entrañas y nos araña el pecho. Pero mira, que ese no es el dolor. Cuando podemos mirar al dolor tal cual es, resulta un inmenso milagro que nos acompaña a resignificar nuestro pasado, nuestro presente y, por lo tanto, nuestro futuro.
No es fácil acompañarnos así, "dejar que lo que duele, duela". Uno teme caer en el peor de los infiernos. Claro, claro que sí. Es sólo porque aún no sabemos cómo es la cara del dolor. Porque pensamos que habrá algo desastroso si el dolor duele. Pero el dolor es un río constante, rivera abajo, que enciende el color de los prados. Y tú puedes ser unos brazos maternales y amables contigo para que la vida transcurra desde un lugar mejor. Cuando por fin se conoce la cara del dolor, el mundo cambia. Tu mundo cambia. Te sitúa en el lugar exacto donde continuar la vida con anchura y un profundo alivio.
Y tú...¿cómo definirías el dolor?
Si quieres saber cuál es la propuesta de Focusing, te espero el próximo 16 de marzo.
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